Diputado Bray Vargas propone evaluar psicológicamente a agentes y capacitarles en relaciones humanas
Santo Domingo. – El diputado Bray Vargas sometió este jueves una propuesta que busca “humanizar la autoridad” mediante la implementación de evaluaciones psicológicas, controles de temperamento y talle...
Santo Domingo. – El diputado Bray Vargas sometió este jueves una propuesta que busca “humanizar la autoridad” mediante la implementación de evaluaciones psicológicas, controles de temperamento y talleres obligatorios de relaciones humanas para todo el personal de organismos de seguridad que interactúa directamente con la ciudadanía.
El proyecto insta al presidente Luis Abinader a instruir a instituciones como la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett), la Comisión Militar y Policial (COMIPOL), la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas a aplicar estas medidas de manera obligatoria tanto al ingreso de los agentes como de forma periódica durante su ejercicio.
“Una autoridad está llamada a poner orden, no a romperlo. El respeto no se impone con miedo, se gana con educación y altura”, sostuvo Vargas, aclarando que su intención no es debilitar a las instituciones, sino fortalecerlas con inteligencia emocional y empatía.
La propuesta también contempla la participación de profesionales en psicología y desarrollo humano en todo el proceso de evaluación y formación.
Críticas a malas prácticas
El legislador denunció además prácticas ilegales y abusivas cometidas por agentes, como la retención de motocicletas por no llevar casco protector y detenciones arbitrarias sin base legal.
“El pueblo no debe sentirse perseguido por sus autoridades, sino protegido por ellas”, afirmó.
Vargas entiende que este tipo de iniciativas pueden contribuir a restaurar la confianza ciudadana en las instituciones y promover una cultura de servicio más profesional, justa y respetuosa.
Con esta resolución, el diputado busca sentar las bases de una relación más sana entre los cuerpos armados y la población, donde el trato digno y el equilibrio emocional sean ejes fundamentales del servicio público.