El primer ministro de Japón rechaza que Estados Unidos pueda compartir armas nucleares con su país
El primer ministro de Japón, Shigeru Ishiba, rechazó este jueves la posibilidad de que el país comparta armas nucleares de Estados Unidos, y reafirmó la voluntad del Ejecutivo nipón de respetar los «t...
El primer ministro de Japón, Shigeru Ishiba, rechazó este jueves la posibilidad de que el país comparta armas nucleares de Estados Unidos, y reafirmó la voluntad del Ejecutivo nipón de respetar los «tres principios no nucleares».
Ishiba se pronunció así al ser preguntado por esa opción en una rueda de prensa celebrada al término de la ceremonia del 80 aniversario del bombardeo atómico de Hiroshima, que tuvo lugar hoy en esa ciudad del oeste de Japón, la primera de la historia en ser atacada con un arma nuclear.
«Ha habido cierta confusión con el hecho de si compartir armas nucleares se traduce en poseerlas, pero no contemplo ninguna de estas opciones basándome en los tres principios no nucleares», dijo Ishiba.
El primer ministro nipón, no obstante, defendió la necesidad de «estudiar» un «fortalecimiento de la credibilidad de la disuasión nuclear», en alusión al paraguas nuclear estadounidense que protege a Japón.
El país asiático se atiene desde 1967 a los «tres principios no nucleares», que consisten en no producir, no poseer y no permitir armas nucleares en su territorio.
Pero el entorno de seguridad más hostil que rodea al archipiélago debido a la guerra de Ucrania, al auge militar de China y los avances nucleares de Pionyang han hecho que durante los últimos años se haya abierto el debate político sobre la posibilidad de que Japón albergue bombas atómicas estadounidenses o mantener la capacidad técnica para desarrollar este tipo de armamento.
El debate sobre la postura nuclear de Japón
Poco antes de convertirse en primer ministro el pasado octubre, el propio Ishiba abogó por la creación de una «OTAN asiática» con la que Estados Unidos pudiera compartir sus armas nucleares, o incluso capaz de desarrollar su propio armamento atómico, en respuesta a la amenaza que supone el estrechamiento de lazos militares entre Rusia, China y Corea del Norte.
Ishiba, no obstante, pareció desechar esta idea después de su llegada al poder, algo que se confirma con sus declaraciones realizadas en el aniversario del bombardeo de Hiroshima.
Otras figuras de peso del gobernante Partido Liberal Democrático (PLD) han abogado por poner sobre la mesa un cambio en la postura antinuclear que mantiene Tokio desde el final de la Segunda Guerra Mundial.
Entre ellas destaca el ex primer ministro Shinzo Abe (2012-2020), la figura más influyente del partido gobernante nipón de las últimas décadas, quien también afirmó en 2022 -el mismo año en que fue asesinado- que Tokio debería contemplar la opción de compartir armas nucleares con Estados Unidos, como hace Washington con sus aliados en la OTAN, y dejar de considerar «un tabú» esa posibilidad.
El peligro de las armas nucleares es más alto que nunca
Entretanto, la Campaña Internacional para Abolir las Armas Nucleares (ICAN) advirtió este miércoles que el riesgo de que se utilicen armas atómicas es mayor ahora que nunca antes debido a las tensiones y conflictos vigentes.
«El riesgo de uso de armas nucleares es más alto ahora que nunca, tenemos una serie de confrontaciones y conflictos que involucran a estados poseedores de armas nucleares», explicó la directora ejecutiva de ICAN, Melissa Parke, en una entrevista con EFE en Hiroshima (oeste de Japón).
Premiada con el Nobel de la Paz en 2017, la organización considera especialmente preocupante el discurso de que las armas nucleares pueden utilizarse de forma táctica: «tenemos que recordar que las bombas lanzadas en Hiroshima y Nagasaki serían descritas hoy como armas nucleares tácticas», añadió.
Parke hizo estas declaraciones minutos después de que concluyera la ceremonia en Hiroshima, que se celebra cada año en dicha ciudad japonesa a la hora en la que se lanzó la bomba ‘Little Boy’ sobre la misma.
«Hace 80 años desde que Estados Unidos inventó y puso en práctica un arma nuclear. Estas armas han matado y herido a centenares de miles de personas y causado un gran daño intergeneracional y medioambiental», añadió Parke.
Parke considera que en Hiroshima no se conmemora «un suceso aislado», sino «80 años de daños catastróficos, generalizados y continuos» y que la única forma de combatirlas supone no solo destruir todas las armas nucleares, sino eliminar también la idea de que la disuasión nuclear es una opción.
Japón desea liderar los esfuerzos contra las armas nucleares
En otro aparte de su discurso, el primer ministro japones afirmó que Tokio debe «liderar los esfuerzos globales» para lograr un mundo sin armas nucleares.
«Liderar la comunidad internacional para lograr un mundo sin armas nucleares es la misión de Japón como único país que ha sufrido la bomba atómica en la guerra, y que aplica los tres principios no nucleares», dijo Ishiba.
El mandatario nipón aludió así a los principios que consisten en no producir, no poseer y no permitir armas nucleares en su territorio, que han respetado todos sus Ejecutivos desde que se declararon en 1967 por el entonces primer ministro Eisaku Sato y posteriormente ratificados por el Parlamento.
Ishiba también destacó la «profundización de las divisiones de la comunidad internacional» acerca del desarme nuclear y el «empeoramiento del ambiente de seguridad», un contexto en el que es más necesario «lograr un mundo sin armas nucleares» a través de las iniciativas de No Proliferación Nuclear (NPT), señaló.
«Haremos un llamamiento a todos las países para sacar el máximo partido a ese espíritu de diálogo durante la reunión de la iniciativa NPT del próximo año», dijo el primer ministro nipón, quien también llamó a «buscar medidas concretas» hacia la desnuclearización que incluyan tanto a países que no poseen armas de este tipo como a potencias atómicas.