Jair Bolsonaro condenado por intento de golpe de Estado en Brasil
Brasilia. – Brasil vivió este jueves uno de los juicios más trascendentales de su historia reciente. La primera sala del Tribunal Supremo Federal condenó al expresidente Jair Messias Bolsonaro por lid...
Brasilia. – Brasil vivió este jueves uno de los juicios más trascendentales de su historia reciente. La primera sala del Tribunal Supremo Federal condenó al expresidente Jair Messias Bolsonaro por liderar una conspiración para impedir el traspaso de poder a Luiz Inácio Lula da Silva, tras perder las elecciones de 2022.
Por cuatro votos contra uno, los jueces lo hallaron culpable de intento de golpe de Estado, intento de abolición del Estado de derecho, daños a bienes públicos y liderar una organización criminal. La sentencia incluye a tres generales, un almirante, un teniente coronel y dos civiles, todos declarados culpables.
El voto decisivo fue emitido por la jueza Carmen Lúcia Antunes Rocha, quien afirmó que “un grupo compuesto por figuras clave del Gobierno y liderado por Jair Bolsonaro llevó a cabo un plan progresivo de ataque a las instituciones democráticas con el objetivo de minar la alternancia de poder y el sistema judicial”.
El juez Alexandre de Moraes, instructor del caso y principal objetivo de la trama golpista, fue categórico al afirmar que el 8 de enero de 2023 “no fue un paseo dominical ni un acto espontáneo, sino un intento de golpe de Estado organizado por una organización criminal”.
Bolsonaro, que no asistió al juicio y siguió el veredicto desde su domicilio en prisión preventiva, enfrenta hasta 43 años de cárcel. Este viernes se definirá la pena concreta y el lugar donde deberá cumplirla, que podría ir desde su casa hasta una celda en una cárcel de alta seguridad.
El fallo marca un antes y un después en la política brasileña. La condena deja a Bolsonaro inhabilitado para competir en elecciones hasta 2030, aunque mantiene su influencia en la derecha y podría ser clave para definir al candidato que se enfrente a Lula en 2026.
El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, calificó el juicio de “caza de brujas” y anunció sanciones contra jueces brasileños, lo que incrementa la tensión diplomática.
La decisión del Supremo envía un mensaje claro: la democracia brasileña puede defenderse de quienes intentan socavarla desde dentro. Sin embargo, el futuro político del país podría tensarse aún más si prosperan los intentos de amnistía impulsados por aliados de Bolsonaro en el Congreso.