Informe de OpenAI alerta: 44 profesiones en EE. UU. enfrentan alto riesgo de automatización
Modelos avanzados de IA superan el rendimiento humano en tareas clave de nueve sectores económicos Un reciente informe publicado por OpenAI encendió las alarmas en el mercado laboral estadounidense: 4...

Modelos avanzados de IA superan el rendimiento humano en tareas clave de nueve sectores económicos
Un reciente informe publicado por OpenAI encendió las alarmas en el mercado laboral estadounidense: 44 ocupaciones se encuentran en “alto riesgo” de automatización debido al rápido avance de la inteligencia artificial. El estudio, basado en la metodología GDPval, analizó de forma comparativa y a ciegas el desempeño de profesionales humanos frente a modelos de IA de última generación, entre ellos Claude Opus 4.1 y GPT-5-high.
Los resultados son contundentes. Claude Opus 4.1 superó el rendimiento humano en el 47,6 % de las tareas evaluadas, mientras que GPT-5-high lo hizo en el 38,8 %, cifras que evidencian la creciente capacidad de estas tecnologías para asumir funciones que tradicionalmente se consideraban exclusivas del intelecto humano.
Empleos de riesgo: de tareas operativas a roles estratégicos
El informe enumera una lista que impacta tanto por su amplitud como por su diversidad. Las ocupaciones más expuestas a la automatización son:
Empleados de mostrador (81 % de vulnerabilidad)
Gerentes de ventas (79 %)
Personal de envíos, logística e inventario (76 %)
Editores y correctores (75 %)
Desarrolladores de software (70 %)
Llama especialmente la atención el caso de detectives e investigadores privados, que registran también una vulnerabilidad del 70 %, pese a que su actividad se vincula a procesos complejos de investigación, análisis de información contextual y toma de decisiones.
Riesgos que alcanzan a sectores altamente cualificados
El documento advierte que el impacto de la automatización no se limita a labores técnicas o operativas. Profesiones con alta formación, como abogados, enfermeros especialistas, gerentes de operaciones, supervisores industriales y trabajadores sociales, también aparecen en los rangos de riesgo. Según los autores del informe, la IA ya puede ejecutar tareas asociadas a redacción técnica, análisis de datos, resolución de escenarios y respuestas jurídicas estandarizadas.
Este fenómeno, afirman los investigadores, desafía la percepción histórica de que la inteligencia artificial solo sustituye funciones rutinarias o repetitivas.
Un desafío para gobiernos, empresas y sistema educativo
Los hallazgos refuerzan el llamado a una adaptación temprana de políticas públicas y estrategias de capacitación laboral. Expertos en economía del trabajo citados en el estudio advierten que la transición no será homogénea: existe el riesgo de que sectores completos pierdan empleabilidad aceleradamente, mientras otros experimentan una demanda explosiva de perfiles especializados en automatización, supervisión algorítmica y desarrollo ético de IA.
En este contexto, OpenAI sugiere la creación de marcos regulatorios, programas de reconversión profesional y mecanismos de acompañamiento para trabajadores en áreas vulnerables. El informe insiste en que el verdadero desafío no es solo técnico, sino social y humano, y que la velocidad del avance tecnológico requiere que gobiernos, empresas y academia actúen con la misma rapidez.









