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Nacionales

David Ortiz recibe el Premio Humanitario 2025 por su labor en favor de niños con enfermedades cardíacas

El legendario exbeisbolista dominicano David Ortiz continúa sumando reconocimientos fuera del terreno, esta vez por una causa que lo ha definido desde su retiro: salvar vidas. Este viernes, “Big Papi”...

Redacción • December 5, 2025 7:58 pm
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El legendario exbeisbolista dominicano David Ortiz continúa sumando reconocimientos fuera del terreno, esta vez por una causa que lo ha definido desde su retiro: salvar vidas. Este viernes, “Big Papi” fue galardonado con el Premio Humanitario 2025 otorgado por The Trust For The Americas, entidad afiliada a la Organización de los Estados Americanos (OEA), por su compromiso inquebrantable con la salud infantil.

El premio reconoce el trabajo que Ortiz desarrolla desde hace casi dos décadas a través de la David Ortiz Children’s Fund, organización que nació tras una visita a un hospital dominicano en 2005, donde el expelotero vio a varios niños recuperándose de cirugías cardíacas. Aquella experiencia, según ha relatado en múltiples ocasiones, le cambió la vida y lo llevó a asumir la misión de apoyar a menores de escasos recursos que requieren procedimientos del corazón.

Desde entonces, la fundación ha financiado más de 1,000 cirugías y tratamientos de alta complejidad, en alianzas con centros médicos en República Dominicana y Estados Unidos. Muchos de estos niños, que no tenían posibilidad de costear intervenciones que superan los decenas de miles de dólares, hoy llevan una vida normal gracias al programa impulsado por Ortiz.

Durante la ceremonia, la organización resaltó que el compromiso de “Big Papi” va más allá de lo económico: acompaña procesos médicos, realiza visitas sorpresas a pacientes y mantiene una participación activa en la captación de fondos. Su labor ha sido catalogada como “un ejemplo de impacto social sostenido y de liderazgo humanitario desde la comunidad latina”.

Ortiz, emocionado y visiblemente agradecido, dedicó el reconocimiento a los niños y familias que han confiado en la fundación. “Este premio es de ellos. Yo solo soy un puente. Mientras Dios me dé fuerza, seguiré trabajando para que ningún niño pierda la vida por falta de atención”, expresó.

El ícono deportivo dominicano, miembro del Salón de la Fama del Béisbol, es hoy una figura clave en el impulso de proyectos de salud infantil en la región. Con este nuevo reconocimiento, su legado trascendente queda reafirmado: no solo hizo historia con un bate, sino también con un corazón dispuesto a cambiar vidas.