¡Lavados nasales! La importancia de una buena técnica
En niños que todavía no pueden sonarse los mocos, los lavados nasales son la vía que utilizan las familias para la limpiar la nariz. Javier Merino, del Colegio de Fisioterapeutas de Castilla-La Mancha, señala a Correo Farmacéutico que una de las primeras cosas que hace un fisioterapeuta respiratorio es pedir a los padres que expliquen cómo llevan a caboContinue reading "¡Lavados nasales! La importancia de una buena técnica"
En niños que todavía no pueden sonarse los mocos, los lavados nasales son la vía que utilizan las familias para la limpiar la nariz. Javier Merino, del Colegio de Fisioterapeutas de Castilla-La Mancha, señala a Correo Farmacéutico que una de las primeras cosas que hace un fisioterapeuta respiratorio es pedir a los padres que expliquen cómo llevan a cabo esta intervención y practiquen en la consulta bajo supervisión. “En muchos casos, no se hace de manera correcta, por lo que se favorece que las mucosidades puedan introducirse en otros conductos, como puede ser el oído”.
Los lavados nasales en la prevención y tratamiento de las enfermedades respiratorias son “de vital importancia”, a juicio de José Méndez, del Colegio de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid. “La limpieza asegura un adecuado filtrado, humidificación y calentamiento del aire, así como la eliminación de mediadores inflamatorios y otras partículas nocivas y favorece el adecuado patrón respiratorio”.
A la hora de realizar los lavados nasales es preferible que el niño este tumbado boca arriba, explica Rafael Miranda, jefe de Pediatría de los hospitales Vithas Nisa 9 de Octubre y Virgen del Consuelo (Valencia) y Rey Don Jaime (Castellón). “Se aplica la solución salina con la cabeza mirando al frente, aplicando presión en el envase”.
Dado que el efecto “es de lavado por arrastre, no sirve de mucho instilar unas gotas en la fosa nasal”.
Expone que el uso de aspiradores nasales no está recomendado en menores de seis meses, “porque su trompa de Eustaquio es más corta, y la presión de la aspiración puede producir problemas en el oído”.
Para los lavados se recurre habitualmente a suero fisiológico, que es una solución salina al 0,9, aunque en los últimos tiempos observa que se está generalizando el uso de soluciones salinas con mayor contenido en sodio, muchas veces comercializadas como agua de mar. Para el pediatra, “su efecto de lavado se ve incrementado por el mayor efecto osmótico debido a su mayor contenido en sal, por lo que se les atribuye mayor efectividad”.
Con información de Cuidate Plus