Lavar el pollo con agua antes de cocinarlo hace daño, según estudio
Desde hace un tiempo, se ha puesto de moda lavar el pollo crudo antes de cocinarlo. Las personas que lo recomiendan sostienen que es bueno lavarlo para dejarlo libre de bacterias y otros organismos dañinos que pueda tener. Y en realidad, debería ser así, como sucede con cualquier otro alimento. Sin embargo, es todo loContinue reading "Lavar el pollo con agua antes de cocinarlo hace daño, según estudio"
Desde hace un tiempo, se ha puesto de moda lavar el pollo crudo antes de cocinarlo. Las personas que lo recomiendan sostienen que es bueno lavarlo para dejarlo libre de bacterias y otros organismos dañinos que pueda tener.
Y en realidad, debería ser así, como sucede con cualquier otro alimento. Sin embargo, es todo lo contrario. El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de EEUU ya lanzó una advertencia: no hay que lavar el pollo, porque corremos el riesgo a propagar las bacterias a los utensilios y otros alimentos que haya alrededor de la zona de nuestro trabajo.
Pollos con bacterias
Dos expertos de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología han explicado que entre el 40 y el 60% de los pollos están infectados con la bacteria campylobacter, que da lugar a diarreas que pueden ser más o menos graves.
De hecho, lavar el pollo crudo puede aumentar el riesgo de propagación de bacterias como la salmonela y la campylobacter a otros alimentos, utensilios de cocina y superficies de la cocina a través de gotas de agua que contienen estas bacterias.
Cómo tratar el pollo
La agencia aconseja colocar el pollo crudo en una bolsa desechable antes de almacenarlo en el frigorífico, lavarse bien las manos con jabón después de manipularlo, usar una tabla de pelar y cortar que no se utilice para el resto de alimentos y, lo más esencial: no colocar ningún alimento cocido o productos frescos alrededor de la misma balda del frigorífico.
La cocción adecuada es la mejor manera de matar cualquier bacteria potencial que pueda estar presente en el pollo crudo. Asegúrate de cocinar el pollo a una temperatura interna segura de al menos 75 grados celsius para garantizar que esté completamente cocido y seguro para consumir.
Fuente: El Periódico