¡Te quito el internet! El nuevo “castigo” de mamá en tiempos digitales
Este domingo, República Dominicana celebra el Día de las Madres, una fecha en la que el país entero se detiene para rendir homenaje a esas mujeres que, con amor incondicional y sabiduría infinita, son...
Este domingo, República Dominicana celebra el Día de las Madres, una fecha en la que el país entero se detiene para rendir homenaje a esas mujeres que, con amor incondicional y sabiduría infinita, son el corazón del hogar.
Las madres dominicanas son expertas en resolver lo imposible, estiran el presupuesto como nadie y cuando de educar se trata, saben mezclar ternura con firmeza. Porque si algo las define, es su compromiso incansable por formar hijos responsables, aunque eso incluya —como toda madre sabe— imponer uno que otro castigo.
Castigos de ayer y hoy: del rincón al Wi-Fi
Con el paso del tiempo, los castigos han evolucionado, adaptándose a las nuevas generaciones. Lo que antes se resolvía con una chancleta voladora o un castigo físico leve como hincarse con los brazos en alto, hoy se traduce en apagar el Wi-Fi, esconder el celular o suspender el acceso a videojuegos.
Antes, la amenaza era no salir a jugar cuerda o quitarle la hora de los “muñequitos” en la televisión. Ahora, basta con un “te voy a quitar el celular” para provocar una crisis en plena era digital. Donde antes se lloraba por no salir al parque, hoy se sufre por no poder ver la última serie en Netflix o jugar en línea con amigos.
¿Castigo o corrección?
A pesar de los cambios, el objetivo sigue siendo el mismo: enseñar. Si bien las corrientes actuales abogan por una crianza más respetuosa y basada en el diálogo, las madres dominicanas —de todas las generaciones— han sabido aplicar correctivos que realmente impactan, siempre con el fin de educar y formar ciudadanos con valores.
Este Día de las Madres es una oportunidad no solo para regalar flores y abrazos, sino también para reconocer esa labor muchas veces silenciosa, que combina amor, sacrificio y una buena dosis de creatividad… incluso al momento de castigar.
Porque ser madre es, también, saber cuándo decir “no”, cuándo apagar el router y cuándo ofrecer una palabra de aliento. ¡Feliz Día de las Madres a todas las que siguen enseñando con amor!
