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Internacionales

Vaticano mantiene cerrada la puerta al diaconado femenino Comisión creada por el papa Francisco

La interrogante sobre si las mujeres podrán convertirse algún día en diaconisas dentro de la Iglesia católica continúa sin una respuesta afirmativa. Un documento divulgado este jueves por el Vaticano ...

Redacción • December 4, 2025 5:25 pm
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La interrogante sobre si las mujeres podrán convertirse algún día en diaconisas dentro de la Iglesia católica continúa sin una respuesta afirmativa. Un documento divulgado este jueves por el Vaticano confirma que, al menos por ahora, la postura oficial sigue siendo negativa, pese a años de debate interno y presiones de sectores que reclaman mayor inclusión femenina en los ministerios eclesiales.

La comisión encargada de estudiar el tema, creada en 2020 por el papa Francisco —fallecido en abril— y presidida por el cardenal Giuseppe Petrocchi, aún no ha alcanzado un consenso definitivo. El informe señala que los especialistas continúan divididos sobre la interpretación histórica del diaconado femenino en los primeros siglos del cristianismo, así como sobre la posibilidad de restaurarlo en la actualidad.

Aunque el Pontífice abrió espacios de diálogo sobre el rol de la mujer en la Iglesia, el Vaticano sostiene que no existen fundamentos teológicos claros para autorizar su ordenación al diaconado, un argumento que mantiene frenada cualquier reforma. La discusión ha generado amplias expectativas, especialmente entre teólogas, religiosas, laicas y movimientos progresistas católicos que entienden que la institución necesita actualizarse y reconocer la labor que desde siempre han desempeñado las mujeres en la vida pastoral.

Sin embargo, sectores conservadores dentro de la Curia insisten en que el diaconado está intrínsecamente ligado al sacramento del orden, reservado a los hombres según la doctrina tradicional. Esta tensión interna ha ralentizado el proceso y ha dejado el debate en un punto muerto.

La publicación del documento reaviva la controversia sobre la participación femenina en una Iglesia que, desde hace más de 2,000 años, ha sido dirigida exclusivamente por hombres. Aunque el Vaticano afirma que la reflexión continúa, no se vislumbran cambios inmediatos.